¡Excusas, excusas, y más excusas!
Que si no tengo tiempo, que si estoy cansado(a) y que si yo no lo necesito. ¡Excusas! A estas excusas yo les llamo “Piedras en el camino hacia el bienestar” y que muchas de estas tenemos a la hora de hacer ejercicios y de alimentarnos saludablemente, ¿verdad?
Veámoslo de esta manera: sacamos tiempo para trabajar, pasarnos el “blower”, hacernos el “pedi” y el “mani”, divertirnos, usar el internet y para ver televisión, ¿pero no sacamos tiempo para la salud? Sepan que si no sacamos tiempo ahora para mejorar nuestra salud, eventualmente tendremos que sacar tiempo para lidear con las enfermedades. Recuerden que tener un estilo de vida saludable reduce considerablemente las probabilidades de padecer muchas enfermedades.
¿Cómo podemos lograr hacer tiempo para la salud y encaminarnos hacia el bienestar? ¡Coordínalo! Si nos programamos e incluimos lo siguiente en nuestra agenda diaria podemos lograrlo:
Positivismo: Continuamente afirmar que podemos lograrlo y eliminar las excusas. Nadie más lo hará por nosotros…
Tomar agua suficiente: ¿Que no puedes vivir sin refrescos, café y alcohol? Disminuir considerablemente el consumo de estos y programarnos para tener agua disponible y consumirla a través del día y evitar la sed.
Comer cada 3 horas: Coordinar nuestro horario diario para comer pequeñas porciones a través del día de comida saludable preparada en casa. Oh, oh… ¡Sí, hay que cocinar!
Hacer compra: Asegurarnos siempre tener alimentos saludables disponibles.
1 hora de ejercicio: Sustituir 1 hora de ver televisión para concentrarnos en nuestro plan de ejercicio diario.
Dormir de 7 a 8 horas: Coordinar nuestro horario para poder descansar. ¡Apaga el internet!
También hay otro tipo de piedras en el camino hacia el bienestar; estas son el social, el familiar y el físico. ¡Lo bueno es que también tenemos formas de sacar estas piedras del camino!
Siempre tenemos una fiesta, cumpleaños, boda o cena donde lo que hay es comida de alto contendido calórico. Ojo, ¡Yo no me pierdo una fiesta! Para poder continuar encaminados al bienestar y a la vez participar de estas actividades cotidianas, podemos coordinarnos para comer justo antes de la actividad y así limitar el consumo de estas comidas llenas de grasas saturadas y azúcar.
¿Se han fijado como siempre posponemos iniciar o continuar nuestro camino al bienestar porque estamos en época de escuela y hay que estudiar con los hijos y llevarlos a la práctica de soccer, baloncesto, pelota, voleibol, etc. o porque es verano y nos vamos de viaje? En vez de sentarnos a ver la práctica desde las gradas, podemos aprovechar este tiempo y ejercitarnos también. En cuanto a los viajes, es cuestión de buscar un hotel con gimnasio y restaurantes de comida saludable. Y por si no se han enterado, ¡en los cruceros hay gimnasio!
Si tenemos alguna condición física o de salud que nos impide encaminarnos hacia el bienestar, sepan que hay una gran gama de ejercicios para escoger, es cuestión de analizar cuál ejercicio nos conviene según nuestra condición.
No hay piedra lo suficientemente grande en nuestro camino hacia el bienestar ni excusa lo suficientemente válida para posponer alcanzar nuestra salud. ¡Vamos a patear esas piedras con los tenis!